Tradicionalmente, se ha visto al producto como el centro de atención de cualquier proceso de venta. Sin embargo, los clientes son la pieza clave para el crecimiento y éxito de cualquier negocio, por lo que priorizar sus necesidades y deseos, es el foco principal. Una correcta atención marca la diferencia en los resultados comerciales, y contar con las estrategias, herramientas y técnicas de gestión de ventas, convertirá a tu potencial cliente en uno fidelizado.